Esta semana se dio a conocer la división entre el congresista demócrata Luis Gutiérrez de Illinois y la Alianza Nacional de Jóvenes Inmigrantes ( National Immigrant Youth Alliance o NIYA), uno de los principales grupos de activistas en favor del DREAM Act liderado por integrantes de Dreamactivist. DREAMActivist.org.
La escisión fue anunciada por Gutiérrez en un lacónico comunicado el lunes: "la oficina de... Gutiérrez no trabajará más con la Alianza Nacional de Jóvenes Inmigrantes y sus activistas afiliados en DREAMactivist.org".
El motivo inmediato esgrimido por Gutiérrez fue la grabación, supuestamente realizada por NIYA sin su permiso, de su conversación con un grupo de padres de inmigrantes detenidos y parte del #Dream30. Adicionalmente, el congresista acusó al grupo de "manipular" a los jóvenes "soñadores" y sus padres.
Los #Dream30 son el grupo de jóvenes que cruzaron el mes pasado la frontera a través de Laredo, Texas, para presentar una solicitud de asilo politico para permanecer en Estados Unidos, el país al que fueron llevados por sus padres de manera indocumentada siendo menores de edad, y el cual consideran suyo. Aunque la mayoría de ellos han sido liberados en territorio estaodunidense con un proceso de asilo politico en marcha -similar al caso de los #Dream9, el grupo que previamente logró el reingreso legal al país a través de una garita en Arizona por la misma vía jurídica- a otros les ha sido negado el procedimiento: dos han sido deportados y se espera que otros tres lo sean en las próximas horas.
Esta crisis pone en evidencia la distancia entre los jóvenes de Dreamactivist/The NIYA, sin duda el ala más radical del movimiento Dreamer, que trabaja en pos de resultados inmediatos en el area de reunificación familiar echando manos de tácticas de desobediencia civil, y aquellos que consideran que lo prudente esperar por la solución integral a través de una reforma migratoria amplia, muchos de ellos desde Washington D.C.
A la lucha de estos jóvenes se han sumado sus padres y otros miembros de la comunidad, ampliando el alcance generacional de su acción política.
Es en este contexto que María Irene Hernández, madre de uno de los integrantes del #Dream30, Brandol J. Pahuamba, escribió una carta abierta a Gutiérrez, expresando su indignación: Brandol, tiene 20 años y fue liberado junto con otros cuatro chicos el 31 de octubre.
"Siempre fui admiradora de Gutiérrez, ahora estoy decepcionada", me dijo este viernes Hernández en una conversación telefónica al explicar los motivos para escribir esta carta que, dice, representa el sentir de todos los padres involucrados en el movimiento -algunos de los cuales también han sido arrestados en las oficinas de los congresistas. "Nos hemos humillado para un pedirle un apoyo y no lo hemos logrado. Ahora nos dice que hemos invadido sus oficinas".
A continuación reproducimos la carta de Hernández (y su foto) en su totalidad.
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