NUEVA YORK.- Rafael Nadal derrotó al número uno del mundo Novak Djokovic de manera inobjetable y se adjudicó su segundo US Open en una final memorable en el que los 25.000 fanáticos hicieron estremecer al gigante de Flushing Meadows, el estadio Arthus Ashe.
El español se coronó de gloria en una competición de altísimo nivel en la que el serbio 'Nole' intentó de todo pero nada pudo hacer para impedir que el español se impusiera por garra y entrega, pero sobretodo porque su tenis fue más solvente a la hora de anotar los puntos. El duelo quedó saldado por 6-2, 3-6, 6-4 y 6-1.
Nadal celebró como nunca, se tiró boca abajo cuan largo es sobre la cancha donde lloró a moco tendido; luego se levantó y saltando como un chiquillo, fue hasta el palco donde estaban su tío y técnico, sus padres y su novia. Y tenía razón, lo que logró el español en Nueva York y jugando como ha jugado, es un triunfo que lo pone a nivel de leyenda.
El jugador mallorquín es considerado el mejor atleta español de todos los tiempos. La reina Sofía de España estuvo en una de las suites para presenciar otra gloria mayúscula de Nadal, ganar el Abierto de Estados Unidos por segunda vez.
Desde el arranque Djokovic quiso imponer su juego pero Nadal logró el primer break a la altura del tercer game y en adelante fue una verdadera tromba de tiros de velocidad endiablada para dejar sin mayor capacidad de respuesta al jugador serbio y establecer el set de apertura en un contundente 6-3.
Las barras en favor de ambos jugadores se convirtieron en protagonistas de la gran final. Con un set en contra, la gente empezó a gritar “Nole, “Nole” como es conocido Djokovic y, al parecer le dieron la inspiración que necesitaba para remontar e igualar en el segundo parcial.
Djokovic se reencontró con sí mismo y rompió el servicio de Nadal. El serbio batalló de tal forma que este segundo parcial fue uno de los más dramáticos del partido. En un intercambio Nadal y Djokovic hicieron levantar de sus asientos sumando 54 de devoluciones, un punto que parecía interminable y que finalmente recayó a favor del serbio. Nadal dio la impresión de perder la concentración y caer en un foso de dudas, dándole a Djokovic la iniciativa para que se adjudicara el segundo set por 6-3.
Al iniciar el tercer set “Nole” continuaba inspirado y se puso arriba 2-0 y cuando parecía que Nadal sucumbiría también en este parcial, reasumió su nivel emparejando y cerrando el set por 6-4.
Sería hasta esa instancia en que Djokovic pudo mostrar su gran jerarquía. Ya para el cuarto set, Nadal pasó a dictar cátedra rebasando una y otra vez contundencia abrumadora al serbio, considerado como el jugador con la mejor defensa del circuito, pero que nada pudo hacer esta oportunidad para contrarrestar a un Nadal que se mostró implacable, el marcado así lo refrenda, 6-1.
Djokovic pasó a la final luego de jugar el viernes un partido de cinco sets y más de cuatro horas de juego ante el suizo Stalisnas Wawrinka. Quizá este tremendo desgaste mermó la capacidad del número uno del mundo que en la final de hoy, al menos en el último set se quedó sin piernas.
Mientras el acceso de Nadal fue más fácil y despachó a su rival, el francés Richard Gasquet, también en la semifinal del viernes, en tres sets y en poco más de dos horas.
Nadal, de 27 años, considerado como el mejor tenista de la temporada 2013, sin embargo el triunfo en el Abierto de Estados Unidos no le alcanza para destronar a Djokovic como primero del ranking y continuará por ahora como segundo, pero la diferencia es mínima y seguramente, su meta a corto es volver a comandar el circuito de la ATP.
Nadal regresó en febrero de una para por lesión en la rodilla izquierda y para sorpresa general, se reinsertó ganando en todo torneo en el que se presentó con excepción de Wimbledon donde fue eliminado en primera ronda.
Con el triunfo de este lunes en Nueva York suma 10 títulos, su décimo tercer Gran Slam y a su cuenta de banco 3.6 millones de dólares, que es lo que paga el Abierto de Estados Unidos al campeón.
Rafael Nadal ganó su primer US Open en el 2010 derrotando a Novak Djokovic, luego el serbio se tomó la revancha triunfando el abierto de Flushing Meadows en el 2011.
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