Después de una batalla de largos meses contra el Síndrome de Cushing, la semana pasada pusieron a dormir al agente canino retirado llamado Judge –pero no sin que antes 90 agentes de policía le rindieran los debidos honores.
En una ceremonia realizada el viernes pasado, los agentes del Departamento de Policía West Deptford de New Jersey se formaron en línea sobre la acera del St. Francis Veterinary Center, ofreciendo un último saludo al valiente colega perruno:
“Judge y yo tuvimos un apoyo abrumador y positivo ese día”, le dijo el lunes a ABC News Michael Franks, quien sirvió al lado de Judge. “A pesar de Judge estaba extremadamente letárgico y que apenas podía caminar días antes de la ceremonia, fue capaz de morder uno de sus señuelos favoritos –una manga protectora de brazo– usado durante el entrenamiento y cargarlo hasta el hospital”.
El pastor alemán comenzó a trabajar con West Deptford en 2007, sirviendo 7 años junto a Franks, quien adoptó a Judge en 2014, cuando el perro se retiró.
Cuando a Judge se le diagnosticó el mal de Cushing ese año, una comunidad recaudadora de fondos para ayudar a pagar la factura médica del agente obtuvo $12,000 en 30 horas –lo suficiente para cubrir los gastos de más de $10,000 que se necesitaban.
Durante su carrera, Judge ayudó a detener a 152 sospechosos, recogió tres armas de la calle, se apoderó de tres vehículos de motor y rastreó “incontables cantidades” de drogas, dijo la policía. Un mensaje en Facebook anunciando la despedida del animal el viernes, señala lo siguiente: “Fue un gran elemento de nuestro departamento y siempre se le extrañará”.
“Se trata de mostrar respeto, pero también la gente que está aquí quería agradecerle a Judge por su servicio a la comunidad”, dijo el sargento Dan Eliasen, quien asistió a la ceremonia en representación de la división K-9 que supervisa en el cercano Departamento de Policía de Glassboro. “Nadie ha olvidado lo que él ha hecho –y eso incluye proteger a su compañero y a su comunidad”, le dijo al South Jersey Times.
Buen chico, Judge.
--Esta nota fue publicada originalmente en inglés por Ryan Grenoble en HuffPost Good News. La traducción es de Sonia Ramírez.
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