Gran lección de aprendizaje me dejó recientemente, escuchar el testimonio sincero de un corazón que recién despertó a la vida como el del reconocido músico, cantante y compositor Draco Rosa. Fue una conversación tan mágica que cuando salimos de la grabación me quedó claro que debo enfocarme en soltar todas las creencias a las que me he aferrado de lo que yo supongo debo recibir y que solo frustraciones me ocasiona al no llegar cuándo y cómo yo deseo porque, de otra manera, la vida o el cuerpo me lo van cobrar.
Draco, quien es sobreviviente de cáncer, contaba que él eligió llevar una vida "oscura por muchos años", una existencia complicada, llena de excesos y que aunque tiene ya cuatro décadas de vida, apenas lleva unos meses viviendo. Tuvo que pasar la experiencia de esa grave enfermedad para realmente abrir los ojos y despertar a la vida.
Qué importante es tomar sentido de cuánto realmente estamos viviendo, sin afán, sin rencor, dolor, sufrimiento, resentimientos, disfrutando de las péquelas grandes cosas y situaciones que nos proporcionan alegrías, cuánto hacemos por mantener el niño que llevamos dentro, por haber sanado episodios de nuestra infancia y de otras etapas de la vida adulta y enfocarnos en disfrutar, agradecer, compartir con nuestros seres queridos, en vez de llevar una vida tan programa por la rutina y concentrados en la obtención únicamente de metas materiales que nos llegue a asfixiar.
De muchas maneras los seres humanos despiertan a la vida. De pronto por un accidente, por una grave enfermedad, cambios drásticos, la pérdida de un ser querido, una pérdida de trabajo y otros, pero también por nuestra propia voluntad podemos detenernos un momento, poner la mano en nuestro corazón, sentir cómo pulsa, maravillarnos de ese milagro, entender que si todavía estamos en la tierra es para cumplir un propósito y avanzar de una manera más relajada, prestando atención a todo lo que hemos descuidado y que le dará un sentido más pleno a nuestra existencia.
Draco me contaba que por ejemplo, él ahora a su equipo de trabajo a cierta hora les dice que paren de trabajar, sea lo que sea que estén haciendo, les motiva para que se retiren a sus casas a compartir, a disfrutar tiempo con los suyos; que empezó a asistir a las reuniones de la escuela de sus hijos y que algunos padres le dijeron que creían que él no existía, porque nunca se había acercado por allá. En general, ahora simplemente le toma gusto a saborear todo lo que la vida ofrece.
Si tu deseo es empezar a celebrar la vida, acá te doy algunos pasos a considerar para hacerlo plenamente.
- ¿Qué estás haciendo que disfrutas, te guste y que al hacerlo no te sientas culpable por ello? Hay mucha personas que, en su afán de obtener bienes materiales enfocadas en solamente trabajar, viven para su profesión, olvidándose, desatendiéndose, y hasta juzgando a quienes sí deciden tomarse el tiempo para tener una calidad de vida con ellos mismos. Si todavía no sabes qué podrías hacer que te guste, pues entonces empieza a escarbarle, a experimentar, pero créeme que es muy necesario llegar a tomarte un tiempo, a diario, para ti mismo.
- ¿Cuán duro te juzgas a ti mismo? Deja de considerar los errores como fracasos, de una vez por todas debes saber que cuando cometes un desacierto avanzas, porque es aprendizaje y eso definitivamente hará que la próxima no caigas en el mismo error. Como escuché decir a alguien recientemente: "a veces Él deja que la vida se ponga de cabeza, para que aprendas cómo vivir de pie".
- Si en vez de enfocarnos en lo que no hemos logrado o según nosotros nos hace falta y empezamos a reconocer lo que sí hemos logrado y avanzado, evitaríamos caer en preocupaciones, frustraciones, miedos, inseguridades y hasta depresiones gratuitas y tendríamos mejores armas para afrontar todo lo que en el camino se nos presente. De esta manera, es fácil vencer gigantes que solo nosotros les damos mentalmente el tamaño. Todo depende de nuestra actitud, claro está.
- Celebra quien eres, deja de compararte, asume de una vez por todas que eres una persona valiente, poderosa, inteligente, capaz y que si tus huellas digitales son únicas es porque realmente solo hay una persona como tú en esta tierra. Deja de preocuparte por lo que son o tienen los demás y trata cada día de ser una mejor versión de ti, eso marcará siempre la diferencia. Nadie tiene una vida perfecta, la mayoría de las personas siempre quisieran saber lo que es calzar los zapatos de otros quienes supuestamente lo tienen todo y curiosamente, esos que supuestamente lo tienen todo, también están queriendo ser o tener la vida que tiene alguien más, simplemente porque no se reconocen como seres humanos únicos con experiencias de aprendizaje diferentes.
- Escucha tu GPS interno, la voz que brota del alma, del corazón, haz todo por alcanzar los anhelos de tu corazón y para nada escuches lo que los demás dicen. Cada quien tiene su propia experiencia de aprendizaje, los demás no saben qué es lo que tú deseas, ni pueden hacer más por tus sueños, que tú mismo.
- Respétate, ámate, recuerda que la vida está directamente relacionada con lo que piensas de ti, piensa positivo, si lo haces, generas sentimientos positivos. De lo contrario la tristeza, angustia, desesperación harían su aparición y con esos sentimientos es más difícil avanzar y tener claro hacia dónde debemos caminar.
- Aprende cuándo ponerle un alto a todos los odios, rencores, resentimientos, y situaciones que te atormentan y que hasta te pueden llevar a una enfermedad al guardar tanto que el cuerpo no sabe por dónde sacarlo y se manifiesta en tumores, cáncer y padecimientos nada agradables. Perdona todo. Empieza por perdonarte a ti mismo siempre, porque dejaste que lo que los demás dijeran o hicieran te perjudicara, al tomarte las cosas personalmente.
- Tómate unas horas, días, minutos de vacaciones cada cierto tiempo para poder limpiar la casa internamente y poner en orden las ideas. Recuerda que cuando no has descansado los pensamientos se distorsionan y perdemos la perspectiva adecuada.
- Ten claro que las situaciones que la vida nos pone muchas veces no van a cambiar, así que lo más conveniente es entonces cambiar nosotros la actitud que tenemos ante esas personas o situaciones. La próxima vez que comiences a preocuparte por algo, decide pensar en otra cosa, avanza, busca algo que te aleje de esos pensamientos que no son tuyos que no te corresponden.
- Establece prioridades en tu vida y en tus días. Hay quienes no se han puesto los tenis y ya quieren haber ganado la maratón, cuando lo lógico es ponernos de pie, caminar, correr y entrenar para la maratón. No quieras evitar pasos, debajo del cielo todo tiene su momento.
- Existen ocasiones en las que debemos ser humildes, tener la sencillez de aceptar que necesitamos pedir ayudar profesional para poder avanzar porque la situación se nos sale de control.
- ¿Cómo mantener la motivación en tu vida? Tu propia mente, pensamientos e imágenes motivadoras te dan el toque de emoción. Debes mantener una conversación interna que te incentive continuamente. La visualización mental y positiva del logro de tus proyectos, te energiza a continuar haciéndolos. La visualización constante de todo lo que amas y deseas en tu vida, la imaginación de ser grande y de haber logrado lo propuesto.
- Haz algo por ti, relájate. A veces somos demasiado críticos y duros con nosotros mismos si por ejemplo, estás a dieta, qué importa una vez cada cierto tiempo comerte el helado o el chocolate que te gusta, claro no es que lo vas a hacer a diario pero también al tener disciplina debes premiarte y reconocer que no todo es esfuerzo en esta vida. Las pequeñas recompensas en el camino nos llevan a grandes triunfos.
- Es posible que día con día amanezcas con una lista de pendientes por hacer y al final del día la lista haya aumentado el doble y arrastremos algunos para otros momentos, otros días, tómatelo con calma y da prioridad a lo que realmente no puede esperar. Cuando haya finalizado tu día deja de pensar en lo que está pendiente. Tómate un tiempo para leer, para ver tu serie de tv favorita, para escuchar un disco, tomarte un té en calma al finalizar el día.
Yo, estoy decidido a encontrar algo que celebrar cada día de mi vida y te invito a que tú también lo hagas... ¿qué dices? ¡Hoy elijo CELEBRAR la vida!
Y recuerda: ¡Sonríe, agradece y abraza tu vida!
Sobre todo: ¡a Vivir, gente! VIVIR.
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