Es algo que soñamos por mucho tiempo: la normalización de las relaciones diplomáticas entre los Estados Unidos y Cuba. Pero habrá que ver las implicaciones que esto pueda tener, especialmente en el ámbito deportivo, y sobretodo en el béisbol.
Es evidente que la posibilidad de evaluar y firmar peloteros cubanos o, incluso, establecer operaciones estilo academias de beisbol en ese país parecieran estar más cerca que nunca luego de los anuncios del presidente Barack Obama. Sin embargo, hay muchos aspectos a considerar.