5 razones por las que no pierdes peso

Hay algunos factores que tal vez no has tenido en cuenta que podrían sabotear tu trabajo y hacerte echar para atrás en el proceso de bajar de peso.
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Hay algunos factores que tal vez no has tenido en cuenta que podrían sabotear tu trabajo y hacerte echar para atrás en el proceso de bajar de peso, o bien darte por vencida en el cumplimiento de las metas que te propusiste a inicios de año para bajar esas cuantas libras. Quizás no has dejado de ir al gimnasio, ejercitarte a menudo, o has comido pequeñas comidas al día y hasta has llevado un diario de lo que comes. Entonces, ¿por qué no bajamos de tallas?

Te daré 5 razones claves del porqué no pierdes peso.

1. Tienes una digestión perezosa.

Entonces necesitas una correcta alimentación cumpliendo los horarios establecidos sin dejar de comer por más de 4 horas. No te saltes el desayuno, trata de comer 2 o 3 porciones de fruta con cáscara al día. Opta por los alimentos naturales y enteros como cereales integrales, nueces, huevos, tortillas, pan oscuro, vegetales y mucha agua.

Evita los jugos de "fruta" empacados y alimentos muy procesados. Hay que evitar las dietas rápidas que afectan tu metabolismo, porque le envían el mensaje al cuerpo de que "no hay suficiente comida" y éste reacciona ahorrando calorías. Además algo muy importante es que hay que dormir suficiente (6 horas mínimo, 8 horas idealmente).

2. Estás haciendo la actividad física incorrecta o incompleta.

Escoge el tipo de ejercicio que te beneficie más. Puede ser que tu cuerpo se haya acostumbrado a un tipo de movimiento que ya no representa un esfuerzo o reto para ti. Recomiendo que aumentes los días que haces ejercicio, la intensidad de la rutina, los pesos y velocidades al hacer pesas o máquinas, y sobre todo, que pruebes una modalidad nueva, algo que nunca hayas hecho y que sea divertido e interesante para ti. Esto te motivará, te hará hacerlo con más energía y entusiasmo. No olvides también que hay que dejar un día de descanso y no repetir el trabajo muscular de ciertas zonas del cuerpo todos los días porque esto limitará los efectos que deseamos.

3. Tu cerebro no recibe los mensajes correctos.

Tu cerebro juega un papel vital a la hora de adelgazar. Sabemos que para adelgazar se necesita una correcta nutrición y ejercicio, pero sucede que el cerebro cumple una función importante en esto. Ocurre que cada mente está configurada de manera diferente, esto quiere decir que algunas personas tienen una respuesta reducida a la hormona de la saciedad (la leptina). Esta hormona tiene por trabajo decirle al cerebro cuando tiene que parar de comer y empezará procesar las calorías. Cuando los niveles de leptina son altos estos actúan en el hipotálamo para avisar que hay que dejar de comer.

En el caso de las personas que producen demasiadas leptinas, puede que los receptores cerebrales se vuelvan resistentes y este mensaje no llegue, así que el problema es cuando te vuelves resistente a la leptina.

4. La forma de tu cuerpo es de "manzana".

Si tu forma corporal es de manzana que es redondita y voluptuosa, ésta hace que el almacenamiento se acumule en la cintura y área abdominal. Esta grasa abdominal se asocia a los niveles de Cortisol (hormona del colesterol) y de la Insulina (la hormona que realiza la función de equilibrar el azúcar en la sangre), así que si tienes forma de manzana y sufres de estrés tendrás un gran reto porque para ti será más duro bajar de peso.

Haz un esfuerzo por reducir el nivel de estrés porque la hormona Cortisol puede estar siendo la razón de que no bajes de peso.

5. No lees el contenido nutricional de tus alimentos.

Comes mucha azúcar o sal sin saber que se encuentra en exceso en ciertos productos alimenticios. Tienes que tratar de informarte más acerca de lo que introduces en tu boca porque por desconocimiento quizás estés consumiendo alimentos muy procesados, cargados de químicos, azucares disfrazadas como la glucosa de los carbohidratos simples (pasta, pan arroz blanco, galletas) la fructuosa de las frutas o jugos, mieles, saborizantes, siropes y demás.

Te doy como ejemplo ciertos yogurts, que a pesar de que son maravillosos para nuestra salud por los probióticos que contienen, en su mayoría están cargados de azúcar. O bien, algunas galletas, cereales o productos que dicen "bajos en grasa" están cargados de azúcar. No todo lo que dice LIGHT es realmente saludable y adecuado.

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